Berlín, la desconocida de Europa, fue capital del mundo, fue el ojo del huracán y fue objeto de estudio por muchos. Ha marcado hechos históricos que algunos jamás podrán olvidar. Por esa razón, cuando planeas unas vacaciones o un fin de semana no piensas en esa ciudad como un destino al que acudir; Londres o París suelen ser las que se llevan la palma de oro.
El vocalista de Los Ronaldos, Coque Malla, hoy con una exitosa carrera en solitario en su disco Mujeres hace un dueto junto con Leonor Watling, que lleva por título Berlín. En esa canción,plagada de armonía nos traslada a esa maravillosa ciudad e incita a descubirla por los cuatro costados. Así que, vamos a iniciar ese viaje por la ciudad que nos describe el cantante.
La primera parada, fue una ruta por los monumentos más emblemáticos desde la famosa Plaza de París donde está ubicada la Puerta de Branderburgo hasta la plaza del 10 de mayo donde se produjo la quema de libros. De esta primera parada, destacar que una parte del trayecto tuve que hacerlo en tren hasta Branderburgo viajé durante dos paradas por unas zona con bosque, espectacular, un trayecto muy corto en tren pero que desde luego, merece la pena.
La segunda parada, fue el barrio judío, que bajo mi punto de vista me esperaba otra cosa. Me esperaba algo con más encanto y más carga histórica. En este caso, me encontré con dos callejones en obras y los grafitis que se ven en las fotografías. La zona donde está ubicado, merece la pena, pero el barrio en sí, no mucho. La vista terminó en Alexander Plaz donde se vislumbra una espectacular catedral.
La tercera parada, fue uno de los monumentos más emblemáticos y con más carga histórica hasta el momento. El muro de Berlín. Cerca de donde me alojaba se podían ver de forma simbólica unos barrotes que simbolizaban la zona por donde pasaba el muro y, a lo largo de toda la calle, se veían exposiciones de fotografía al aire libre donde mostraban momentos del fin de la guerra fría. El recorrido terminó en el East Side Galery donde se ven grafitis sobre algo mas de un kilómetro de muro y sobre todo las pinturas se divisan por la zona del este. La puesta de sol,era maravillosa, se veía caer el sol sobre uno de los símbolos mas importantes de la historia.
La cuarta parada, fue hacia el sur. Me dirigí hacia otro barrio, una zona plagada de encanto cubierta por una edificación propia del Madrid de los austrias rodeados por una paisaje otoñal de película de Billy Wilder.
La quinta parada, fue el barrio de Prelauzerber, una zona bohemia sin perder el encanto propio de la ciudad donde las tiendas de segunda mano son una realidad, las familias en bicicleta y los parques llenos de hojas.
Sin más, me despido de vosotras/os y nos vemos pronto. Mientras tanto me podéis seguir o bien en instagram que soy @labandidabandida o en twitter que soy @labandida_
Deja una respuesta